
Me gustaría llevarme a todxs mis estudiantes de viaje. Sacarlos de la caja, de las cuatro paredes del aula y al pizarrón de madera convertirlo en el combustible para una fogata en una noche estrellada!
La foto que precede estas palabras. Ese dibujo no es mío! Ya quisiera yo tener la habilidad del dibujo en mis manos. Pero no, a mí se me dan otras cualidades pero el dibujo me está vedado! Como en tantas oportunidades requiero de la habilidad de algún alumno y lo invito a dibujar, a darme una mano para compensar la falta de mapas en la escuela.
Teoría de la deriva continental
A principios del siglo XX Alfred Wegener publicaba un libro donde desarrollaba su teoría de la deriva continental. Apoyado en su presunción sostuvo que los continentes ocupaban lugares diferentes a los que ocupan en la actualidad.
Para sostener su idea, Wegener encontró una serie de evidencias que demostraran su hipótesis:
- La forma de los continentes: si prestamos atención a la foto podemos notar como encajan algunos de los continentes.
- Evidencias fósiles: el científico demostró que tanto en América como en África había restos fósiles de Mesosaurus Una especie de reptil que no podía volar, ni nadar. Por lo que su presencia en los dos continentes separados por el océano Atlántico evidencian que las masas continentales estuvieron unidas.
- Estructura de las cadenas montañosas: la similitud entre cadenas montañosas que en la actualidad se encuentran separadas por miles de kilómetros como los Montes Apalaches (América del Norte) y los Montes Escandinavos (norte de Europa)
Estos son sólo algunos de ejemplos que prueban que hace millones de años existió un super continente que Wegener llamó “Pangea” Del griego “PAN” (todo) y “GAIA” (tierra)
Estoy convencido que “a viajar se aprende y se enseña” Por lo menos así me lo demuestra la experiencia. Alguna vez como estudiante, como mis estudiantes, me sentí asqueado en clase de geografía o historia, aquello me resultaba lejano, ajeno. Desde aquellos días he sentido una y otra vez que no me basta leer sobre lugares y su historia. Hoy, como profesor, a regañadientes enseño con libros e imágenes. Cuando puedo me doy la licencia de trabajar con blogs de viajeros, invito a alguno a que nos visite porque estoy convencido que estudiar es mucho más que repetir mecánicamente las capitales, las presidencias o los ríos de Europa.
Me gustaría llevarme a cada uno de mis estudiantes de viaje y sé, me lo han demostrado algunos de ellos, que lo hemos hecho…
Algún día, espero, deseo, que el Estado tome nota de esto e invierta el dinero necesario para que con mis chicxs podamos saltar el mapa, romper el pizarrón y palpar las eras geológicas.
Estoy convencido que nada sería igual si nuestros estudiantes pudieran viajar más allá de la imaginación, más allá de la “energía e impulso”, que le pongamos los profesores.
A los sistemas educativos les falta una materia: ¡VIAJAR! Ustedes que piensan!?